Aunque hoy no puedo dejar de pensar en MARÍA, esa niña que le gusta jugar con su amigo a pesar de ser "especial", no hablar, no moverse o no poderse arrascar el brazo. Un corto con un merecidísimo Goya, ya era hora que se valorara el acercarse a esos niños especiales, con los que trabajo diariamente y a los que te hacen sentirte especial a tí por poder formar parte o mejorar un poco su calidad de vida...
Ojalá todos lleváramos dentro un poquito de María: esa sensibilidad, humildad, entusiasmo y sobre todo amistad.
Supongo que la mayoría lo ha visto, y el que no, aquí tiene el vídeo para no perdérselo.